Los investigadores descubrieron que la ingesta de thiamethuxam incluso en dosis muy pequeñas son letales para estos animales.
Estas muertes suponen tres veces la tasa normal.
Los científicos determinaron que la población de las abejas podria reducirse a la mitad, llegando incluso al 75%, si la mayoria de los miembros de una colonia se viesen afectados por el producto.
El estudio demuestra que una pequeña dosis de imidacloprid, otro insecticida neonicotinoide afecta a los abejorros, reduce su peso y hace que las colonias engendren un 85% menos de abejas reinas.